Queríamos en este breve artículo, y debido a que las consultas que recibimos van en aumento, aclarar una serie de conceptos que acostumbramos a utilizar indistintamente, y que, sin embargo, definen hechos diferenciados. Hablamos de nuevo de tasación, valoración, valor, precio mercado, peritaje, autenticación y certificación de una obra de arte. Como no pretendo complicar más el panorama, iremos paso a paso. Definiendo de nuevo lo que cada palabra implica.
Si tenemos, por ejemplo, una pintura de Pablo Picasso, además de ser muy afortunados, podemos tener dudas acerca de su valor o incluso de su autenticidad. En este caso querremos tener claro los siguientes conceptos: Valoración de una obra: es el ejercicio de determinar la cantidad de dinero por la que se transmitiría la propiedad en una hipotética venta. Obviamente, para que la valoración sea lo más fiel posible, implica que se cumplan varios factores. Los lógicos conocimientos del profesional, así como su imparcialidad. Esto quiere decir que no debiera existir vinculación entre la persona que valora y el posible comprador. Tasación de una obra: pues es prácticamente lo mismo que la valoración.
Peritación o peritaje
Es el trabajo de estudio y evaluación efectuado por un perito. Un perito es un profesional dotado de los conocimientos pertinentes y especializados y que suministra información fundada, a través de un dictamen. Trabaja tanto privadamente como ante tribunales de justicia. En caso de tener que establecer valoraciones por un pleito o juicio, la acción del Perito Judicial se hará imprescindible.
Precio de mercado
El precio de mercado es la contraprestación económica que un comprador recibe por la venta, en este caso, de una obra de arte. Ya no hablamos de un precio teórico, sino de un hecho consumado. El conocimiento de este precio y de otros muchos precios de mercado de la obra de Picasso, de la que hablamos, nos servirá para enriquecer nuestra base de datos y valorar más adecuadamente el siguiente cuadro de Picasso que tengamos. Solo recordar que los datos de una venta no son automáticamente extrapolables. No hay todavía un único mercado, sino que un gran mercado continúa interactuando con pequeños mercados globales.
Autenticación de una Obra de Arte
Es el estudio y proceso por el que una obra de arte se atribuye (o no), indubitadamente, a un autor en concreto. Constituye una serie de procedimientos más o menos complejos, dependiendo del experto, de la obra y del autor.
Se habla mucho de métodos científicos, así pues, es normal utilizar luz rasante, luz ultravioleta, reflectografía de infrarrojos y rayos X. También análisis de pigmentos o de otros materiales. Lo cierto es que los resultados de las pruebas citadas no acostumbran a asegurar la autoría de la pintura, sino más bien a descartarla. Son, por decirlo de alguna manera, pruebas eliminatorias. Hay métodos empíricos, como el Análisis Morelli, desarrollado por el físico y coleccionista Giovanni Morelli, a finales del siglo XIX. En la mayoría de los casos, prima más el estudio de la obra completa, la experiencia y el análisis de imágenes digitales ampliadas. Muchas veces, existen comités de expertos de un autor en concreto o fundaciones. En otros ámbitos, es la propia familia la que ejerce de experta y conservadora.
Certificación de una Obra de Arte
El experto o el comité de rigor, finalmente, plasma en un documento los resultados de los estudios, pruebas, etc. Este será el pasaporte de nuestra obra. Ahí es donde quedará reflejado el conjunto de datos y la autoría. A destacar que coexisten certificados “de primera” o de inferiores categorías. Que pretendo decir: que no es lo mismo que el Comité Picasso, integrado por familiares del artista y expertos, emitan un certificado, a que lo emita un experto local especializado en muchos más autores.
El enlace siguiente a un artículo de prensa sobre el mundo del arte y las falsificaciones es muy ilustrativo.
¿Quién vigila a la policía del arte?
Como siempre, en caso de duda, no tienes más que ponerte en contacto con nosotros.